viernes, 16 de mayo de 2014

Reseña de las X Jornadas Científicas y Profesionales de Traducción Médica



     Los días 3, 4 y 5 de abril de 2014 se celebraron en Vigo las X Jornadas Científicas y Profesionales de Traducción Médica, organizadas en colaboración entre la AGPTI y Tremédica. Ofrecieron a los asistentes la ocasión de conocer la Facultade de Filoloxía e Tradución, donde se celebraron las dos primeras jornadas, y la Fundación Barrié de la Maza, lugar de encuentro del tercer día. Y aunque faltó la presencia de Fernando Navarro y hubo que reorganizar ligeramente el programa, como no hay mal que por bien no venga, eso permitió aprovechar algunos talleres que de otra manera se solapaban.

     Tras un largo viaje en tren, el primer día se hizo un poco más largo de lo esperado. Menos mal que la organización nos facilitó las cosas con un autobús directo al CUVI y las amenizó con tentempiés dignos de un rey. No faltó detalle: un programa excelente, material y sorpresas para los asistentes, interpretación simultánea a cargo de estudiantes de interpretación, recepción, pausas de café y cena que permitieron que nos fuéramos conociendo y estiráramos las piernas, todo con un orden y una puntualidad impecables.

     El jueves tuvimos la oportunidad de conocer un poco más acerca de TermCoord de la mano de Rodolfo Maslias (director de Termcoord, Parlamento UE), quien nos presentó el proyecto y otros útiles recursos para traductores médicos: aplicaciones de acceso directo para sitios web, recursos en 24 idiomas, scoop.it (periódico electrónico), sloovle.com, DocCiSMeF, etc. Después, Xusto Rodríguez, del Servizo de Normalización Lingüística de la USC, nos hizo navegar por el océano de bUSCatermos, su historia y la manera en la que remando, poco a poco esta interfaz de consulta en la base de datos terminológicos de la Universidad de Santiago se mantiene a flote.

     El viernes comenzamos con la conferencia de Bertha Gutiérrez, presidenta de Tremédica, sobre el lenguaje de la medicina en español, durante la cual nos contó cómo han ido cambiando las cosas en este ámbito desde el siglo XVIII, cuando la ciencia y la lengua procedían del francés, hasta el siglo XXI, cuando proceden mayoritariamente del inglés, pasando por el siglo XIX, momento en el que en España no había instituciones que potenciaran el español como lengua de comunicación científica y había que adoptar los neologismos procedentes de otros idiomas (hoy en día todavía no existen). También planteó varios problemas debidos a la falta de cuidado de la lengua española en lo relativo a la ciencia y propuso soluciones para evitar que el inglés acabe colonizando por completo la España científica. Tras el café disfrutamos de un taller sobre la traducción de los consentimientos informados en investigación clínica gracias a Lorenzo Gallego, con ejercicios prácticos basados en la experiencia personal del ponente; fue una experiencia muy enriquecedora y real. Para finalizar este lluvioso día, Joâo Roque Dias nos iluminó con una potente ponencia sobre el valor del traductor y de su trabajo que culminó con la entrega de dos artículos de diseño de lujo. No diré qué en particular, solo que tuve la suerte de ganarme unos de ellos y traérmelo a casa. ¡Gracias, Joâo!

     Por la tarde todo se complicó, ya que la cantidad de talleres propuestos nos obligó a elegir: entre terminología para pacientes (Maribel Tercedor y Clara López) y grupos nominales expandidos en el lenguaje médico alemán y sus equivalentes en portugués (Teresa Alegre y Katrin Herget); entre un ejemplo de traducción veterinaria (Anna Romero) y cuestiones de género en textos científicos sobre reproducción asistida (María Carreras y Monica Savoca), y entre memoQ (Fernando Vidal) y la denominación de las profesiones sanitarias en masculino y femenino (Teresa Miret). Acabamos el día con la cena oficial, que se celebró en el museo Marco de arte contemporáneo y nos permitió degustar un exquisito cóctel mientras charlábamos de temas científicos y traductoriles, entre otros.

     El sábado, en la Fundación, primero José Antonio de la Riva Fort realizó su taller sobre la traducción médica en la industria editorial. Nos habló de los procesos a los que se someten las traducciones en una editorial y explicó los distintos papeles de los intervinientes; puso un caso práctico de indización y nos enseñó algunos trucos. Tras una breve pausa, asistimos a una mesa redonda titulada La interpretación de conferencias en el ámbito sanitario y la situación de interpretación sociosanitaria y formada por Lara Santos, Susana Piñón, Michael Skinner, Luis Alonso y Anthony John Rostron. En ella se expuso la situación actual en este ámbito, se contaron experiencias particulares y se destacó la degradación del prestigio que han ido sufriendo los intérpretes a lo largo de los años.

      Para finalizar, en el acto de clausura se sortearon varios ejemplares del DTM de la Real Academia Nacional de Medicina, varias suscripciones a Cosnautas, un libro titulado El arte de traducir del inglés (de 1954, que ahora descansa en mi biblioteca particular) y otros libros. Por último, agradecimos con un fuerte aplauso al Comité organizador su enorme esfuerzo y el gran trabajo, deseando que se celebre pronto la undécima edición.

martes, 6 de mayo de 2014

La importancia de la buena presencia para el traductor



Hace poco se comentaba por los foros profesionales que una de las ventajas de ser traductor autónomo es que, al trabajar desde nuestro rincón, podíamos hacerlo hasta en pijama, que la imagen no importaba. Pues bien, esto es lo que opino yo al respecto: DEPENDE. ¿De qué depende? De varios factores: del momento, del lugar, del tipo de traducción al que nos dediquemos...

El trabajo del traductor no consiste solo en traducir. De hecho, para poder llegar a esa etapa tenemos que ganarnos los clientes, que son los que pagan las traducciones de las que nos vamos a ocupar y, después, mantenerlos (por si acaso alguien piensa que una vez conseguida la cartera, nos podemos relajar). Si se presenta el caso y un cliente nuevo, que no nos conoce, ni tiene referencias, pide una traducción, una imagen correcta nos ayudará a captarlo. ¿A qué me refiero con imagen, si hoy en día, con Internet, ya ni nos vemos las caras? Pues a una buena imagen corporativa, un logotipo descriptivo y exclusivo, una página web bien hecha y, más concretamente, a una respuesta precisa, adaptada, rápida... Pero este es un caso extremo, porque aunque no nos veamos en persona (que sería lo ideal), todo cliente se forma una imagen del traductor, y viceversa, y esa imagen debemos crearla y conservarla, no solo a través del aspecto, sino con el comportamiento y el trabajo que realizamos. Muchos son los factores que afectan a la imagen que un cliente tiene de sus proveedores, por eso, no es recomendable descuidar ninguno.

En cuanto al aspecto, existe una gran diferencia entre dar una buena imagen e ir de etiqueta. Si bien es cierto que nuestra profesión, en ocasiones, nos permite libertad para elegir la ropa que llevamos al trabajo (ya sea al despacho de la habitación de al lado o a una oficina alquilada, las oficinas de un cliente, una agencia, etc.), en otras, es mucho más exigente de lo que parece. En función del campo o la especialidad de la traducción, el traductor tendrá más o menos flexibilidad con la indumentaria. Me explico, si nos dedicamos a la traducción jurídica o económica, nuestros clientes serán bancos y entidades financieras, un ámbito en el que no llevar traje es impensable, por lo que si nos reunimos con un cliente y no nos adaptamos a su sector, este percibirá una falta de conocimiento o interés que puede jugar en nuestra contra a la hora de ganárnoslo; será mucho mejor un traductor que conozca los protocolos, tanto implícitos como explícitos, del mundo en el que se va a mover. Por otra parte, si nos dedicamos a la traducción de textos turísticos, estos encuentros ofrecerán mayor flexibilidad respecto a este tema (lo que no quita que si vamos en bañador, no nos dejen ni entrar a la sala de reuniones).

El truco está en ser precavido, observador e interesarse por el sector del cliente para adaptarnos a él, tanto en aspecto como en el uso del lenguaje y la comunicación (que al fin y al cabo, refleja nuestra manera de trabajar). Una buena presencia no implica tener que llevar traje todos los días, pero es indispensable mantener una higiene y un aspecto adecuados, porque en cuanto menos lo esperemos, salta la liebre. Si estamos frente al ordenador y un cliente nos llama por vídeo conferencia, mejor no hacerle esperar mientras nos arreglamos o rechazar la llamada, puesto que podemos perder un proyecto o hasta el cliente. Es importante estar siempre alerta y preparados para no perder ni un minuto, porque el tiempo, tanto del cliente como el nuestro, es lo más valioso que tenemos y podemos ofrecer.

lunes, 24 de marzo de 2014

Herramientas útiles para traductores



     Hoy me gustaría contaros algunas de las ayudas con las que contamos los traductores para trabajar. A diferencia de lo que muchas personas puedan pensar, no lo sabemos todo sobre las lenguas con las que trabajamos, ni almacenamos en nuestra memoria (física y personal, la cabeza) toda la información relativa a los proyectos en los que participamos. En particular, os voy a contar cómo me organizo yo y de qué herramientas me valgo para hacerme el día a día un poquito más fácil, de diccionarios y aspectos informáticos os hablaré en otra entrada más adelante.

     Empezaré por el principio, ¿dónde apunto las tareas que tengo que hacer y cuándo tengo que hacerlas? Pues en una agenda de papel de toda la vida. Empecé a utilizarlas en el instituto para anotar los deberes y mantengo la rutina desde entonces; me funciona de maravilla. He intentado cambiar de sistema y actualizarme, pero, oye, la tecnología no me sirve para esto. Con los calendarios de Google o Yahoo, por ejemplo, recibía molestos mensajes recordatorios cada dos por tres que interrumpían más que ayudar y, después, cuando había algo importante, en ocasiones hasta pasaba desapercibido. Conclusión: en mi caso no hay nada mejor que una buena agenda en papel para mantener un registro accesible de las actividades y los asuntos de los que me tengo que ocupar.

     Además, en mi escritorio no falta el papel ni los bolis, así como los rotuladores fluorescentes. ¿Antigualla? Quizá, pero la mesa estaría vacía sin ellos. El papel, siempre reciclado, en sucio, ya que es para hacer garabatos (tipo post-it, que también tengo varios tacos) y acordarme de las tareas pendientes para un futuro muy próximo, como unificar terminología en traducciones o revisiones largas, anotar comentarios para el cliente o preguntas para el gestor del proyecto.

     Por otro lado no puede faltar la esponjita anti estrés. La mía es una minipinta de Guinness, y, para mejorar la ergonomía —paso muchas horas delante del ordenador—, un teclado y ratón externos, además de un elevador de pantalla, una cómoda silla de oficina con ruedas y un reposapiés. Es importante mantener una postura adecuada: codos y rodillas que formen ángulos rectos, y la espalda y el cuello rectos para no sufrir (más) lesiones.

     Y ya, llegando al final por hoy, los aspectos técnicos básicos, útiles para cualquier persona que trabaje con un ordenador: el antivirus y las copias de seguridad. El primero es importante para mantener la «higiene informática» y trabajar a gusto. Por ejemplo, si tenemos uno de esos incómodos virus que abren ventanitas del navegador cada dos por tres nos bajará el rendimiento y se nos quitarán hasta las ganas de sentarnos a vagabundear por la web. Lo de las copias de seguridad es algo que todos sabemos pero que nos cuesta enormemente, no sé por qué. ¿A quién no le ha ocurrido alguna vez un repentino apagón del ordenador con su correspondiente pantallita azul que te dice que o formateas o no se enciende ya más justo antes de entregar un trabajo de la universidad, un proyecto o imprimir un documento importante? Hay programas que realizan copias de seguridad automáticas, como los antivirus que realizan análisis del sistema periódicamente, que a la larga evitan muchos problemas y ahorran infinidad de disgustos y de tiempo.

     Espero que mi experiencia os sirva, al menos de guía, para facilitaros el trabajo diario y la concentración. ¿Cuáles son vuestros trucos? ¿En qué condiciones trabajáis vosotros mejor? ¡Creemos entre todos el despacho ideal!

lunes, 3 de marzo de 2014

Tertulia de Asetrad en Madrid (28/02/2014)



     El viernes 28 de febrero, Asetrad celebró la primera tertulia informal del año en Madrid. Una veintena de profesionales del mundo de la traducción (técnicos, intérpretes y traductores) se reunieron en la sala Clan para charlar y conocerse en un ambiente agradable y distendido. En un principio se iban a unir tres socias de UniCo, pero se perdieron en los encantos de la Casa del Lector y finalmente no pudieron acudir. Esperamos poder coincidir en otra ocasión.

     Aunque el tiempo del que disfrutamos en el restaurante fue un poco escaso, resultó suficiente para poder degustar cada una de las exquisiteces que se sirvieron. El personal estuvo muy atento y servicial, el local estaba bien iluminado y no recuerdo si había música, por lo que pudimos charlar sin dificultad y poner cara a algunos de los nombres que ya nos sonaban.

     Después, a pesar de perder a algunas por el camino, continuamos la velada en La Bámbola, un bar muy curioso, algo retro, con un amplio espacio en el que pudimos también movernos a nuestras anchas y seguir con las discusiones. Según los asistentes iban desapareciendo, los que quedábamos nos íbamos animando al ritmo de La chica Ye-Yé y Black is black para acabar en un bar local de mojitos cubanos donde pusimos fin a una noche interesantísima y sobre todo muy divertida.

    Una mención especial para Héctor Quiñones y María Galán: gracias por vuestra ayuda en la organización, sin vosotros no sé cómo lo habría hecho. También quería agradecer su presencia a los asistentes y a los que quisieron, pero no pudieron venir: ¡os esperamos en la siguiente! A continuación, un par de fotos para la posteridad.

Los que aguantaron hasta el final:





Compañeras de la UAM:

viernes, 7 de febrero de 2014

Reseña del encuentro de la Red FE (réseau franco-espagnol de traducteurs professionnels)


     Dans le cadre d'une rencontre organisée par le réseau franco-espagnol Red FE, des traducteurs professionnels d'Asterad, la SFT et exceptionnellement l'APTIC, se sont réunis les 24, 25 et 26 Janvier 2014 à Toulouse.

     Malgré la forte pluie qui nous a accompagnés les deux premiers jours, nous avons eu l'occasion de visiter le plus grand site d'assemblage d'avions civils au monde, de profiter de la bonne nourriture et du bon vin, d'assister à une excellente conférence dirigée par Chris Durban et de rencontrer des professionnels, qui comme moi, travaillent souvent avec le français et l'espagnol (pas spécialement dans cet ordre). Dimanche les cieux nous ont offert une trêve afin que nous puissions visiter la ville et connaître les endroits connus pour être historiquement liés à l´Espagne. Le guide nous a expliqué qu'il n'existe pas encore de tour spécifique dédié à ce sujet, mais la demande croissante des visiteurs provenant de la péninsule ibérique a poussé l'office du tourisme à en considérer la création.

     De estas jornadas cabe destacar la gran fluidez de la comunicación entre los asistentes, la excepcional presentación sobre cómo transformar los clientes potenciales en clientes a raíz de los acontecimientos profesionales y la gran aportación de ideas para intentar que la red franco-española se reactive para mantener unidos ambos lados de los Pirineos; sugerencias como la creación de un banco de tiempo para fomentar y facilitar la colaboración entre profesionales, que propuso Mar Fernández y que logró una respuesta muy positiva en general.

     Desde el punto de vista social, la reunión resultó un éxito rotundo. En las comidas, las cenas, los descansos, todo el mundo tuvo tiempo de conocer un poquito de los demás, la gente se movía de un lado a otro para entablar conversaciones diversas con todos los asistentes y el ambiente no faltaba de risas y un elevado tono à l'espagnole.

     En definitiva, todo un evento que me gustaría agradecer a Carmelo Cancio, Ester Habas y Emmanuelle Charrier, por la iniciativa, el esfuerzo y la tremenda acogida. Nous espérons être à la hauteur pour la prochaine rencontre qui aura lieu de notre coté des Pyrénées en 2015.

     A bientôt !